martes, 19 de mayo de 2009

5 CANCIONES BONITAS PARA TRATAR DE DECIRTE LO QUE SIENTO.

Me pides, casualmente, sin presiones, que te escriba algo. Como si fuera tan fácil. Como si no cada letra golpeada en el teclado llevara tu nombre, tu presencia, tu olor. Y es que quiero escribirte todos los días, el resto de mi vida. Sólo no sé cómo, no encuentro las palabras, no sé cómo repetir tantas veces lo que te digo cada día sin que suene monótono, sin que te canse. Y es que siento tanto, que mi oficio entorpecido no alcanza ya a darle sentido en estas letras. Recurro entonces, como antes, a palabras dichas por personas con más talento que yo, esperando que en esas otras voces pueda dejarte más claro todo lo que me despiertas:



Billy Joel - The Longest Time.

Oh, oh, oh,
For the longest time.
Oh, oh, oh,
For the longest time.
If you said goodbye to me tonight,
There would still be music left to write.
What else could I do?
I'm so inspired by you.
That hasn't happened for the longest time.

Once I thought my innocence was gone,
Now I know that happiness goes on.
That's where you found me,
When you put your arms around me.
I haven't been there for the longest time

Oh, oh, oh,
For the longest time.
Oh, oh, oh,
For the longest time.
I'm that voice you're hearing in the hall,
And the greatest miracle of all
Is how I need you
And how you needed me too.
That hasn't happened for the longest time

Maybe this won't last very long,
But you feel so right
And I could be wrong,
Maybe I've been hoping too hard
But I've gone this far
And it's more than I hoped for.

Who knows how much further we'll go on,
Maybe I'll be sorry when you're gone.
I'll take my chances.
I forgot how nice romance is.
I haven't been there for the longest time.
I had second thoughts at the start.
I said to myself;
“Hold on to your heart”.
Now I know the woman that you are;
You're wonderful so far,
And it's more than I hoped for

I don't care what consequence it brings,
I have been a fool for lesser things.
I want you so bad,
I think you ought to know that
I intend to hold you for
The longest time.

La Casa Azul – Mucho Más De Lo Normal.

Llegas a casa tarde y no paras de hablar.
Y aunque no lo parezca quiero que hables más.
Eso me tranquiliza, ver que no tienes prisa,
Y de paso conozco a Gadamer y me hago fan

Cuesta reconocer lo mucho que me das;
Me absorbes, me inquietas, me consientes estallar.
Prescindes de mis urgencias
Y ríes mis ocurrencias.
Te veo tan guapa en este bar.

(Así que)
Vamos a bailar,
Prometo no estar quieto y olvidar
A los que nos rodean.
Tus adidas se estropean cuando paras de saltar.

Sabes que es verdad,
Te quiero mucho más de lo normal.
Voy a tener paciencia,
Que es la madre de la ciencia y algo más.

Puede que no te escuche siempre y ¿qué más da?
Estoy admirando tu tono y tu expresividad.
Me sacio con tu presencia
Y asumo las consecuencias.
Estás tan hermosa en este bar.

(Así que)
Vamos a bailar,
Prometo no estar quieto y olvidar
A los que nos rodean.
Tus adidas se estropean cuando paras de saltar.

Sabes que es verdad,
Te quiero mucho más de lo normal.
Voy a tener paciencia,
Que es la madre de la ciencia y algo más.

Vamos a bailar,
Prometo no estar quieto y olvidar
A los que nos rodean.
Tus adidas se estropean cuando paras de saltar.

Sabes que es verdad,
Te quiero mucho más de lo normal.
Voy a tener paciencia,
Que es la madre de la ciencia y algo más.

The Postal Service - Such Great Heights.

I am thinking it's a sign that the freckles
In our eyes are mirror images and when
We kiss they're perfectly aligned.

And I have to speculate that God himself
Did make us into corresponding shapes like
Puzzle pieces from the clay.

And true, it may seem like a stretch, but
Its thoughts like this that catch my troubled
Head when you're away when I am missing you to death.

When you are out there on the road for
Several weeks of shows and when you scan
The radio, I hope this song will guide you home.

They will see us waving from such great
Heights, 'come down now,' they'll say
But everything looks perfect from far away,
'come down now,' but we'll stay...

I tried my best to leave this all on your
Machine but the persistent beat it sounded
Thin upon listening.

That frankly will not fly. you will hear
The shrillest highs and lowest lows with
The windows down when this is guiding you home.

They will see us waving from such great
Heights, 'come down now,' they'll say
But everything looks perfect from far away,
'come down now,' but we'll stay...

Zoé – No Me Destruyas.

Ya no me destruyas con tus mitomanías.
No rasgues mis alas que me duelen.
Pastillas gigantes, recámaras secretas
Con luces obscenas. Sáquenme de aquí.

Y es triste aceptarlo
Pero no vale llorarlo.
Uno siempre recibe
Lo que viene dando.
Ya no afiles las navajas,
Ya no me haces daño cuando me las clavas.
Ya no afiles los colmillos,
Ya no me haces daño cuando me desangras.

Ya no me destruyas más (x2)

Ya no me destruyas mejor desaparece,
No rasgues mis alas que me duelen.

No me destruyas más (2X)
No necesito más.
No me destruyas más.
Ya no afiles las navajas,
Ya no me haces daño cuando me las clavas.
Ya no afiles los colmillos,
Ya no me hacen daño cuando me los hundes.
Ya no me destruyas más (x2)

Solomon Burke - Don't Give Up On Me.

If I fall short, if I don't make the grades,
If your expectations aren't met in me today,
There is always tomorrow, or tomorrow night.
Hang in there baby, sooner or later
I know ill get it right,
Please, don't give up on me.
Oh, please, don't give up on me.

I know it’s late, late in the game,
But my feelings, my true feelings,
Haven't changed
Here in my heart
I know, I know I was wrong, wrong, wrong, wrong, wrong, wrong.
I'd like to make amends for the love that I never, ever, ever, ever shown
Just don't give up on me, every word is true.
I'll give you my everything, all of my love, all of my love, all of my love, love, love to you,
Just don't give up on me.
Oh please, please, please,
Don't give up on me.

I don't want you to.
I know it’s late, but wait, please, please, please, please,
Don't give up on me.
Promise, will you promise, will you promise me
Please don't give up on me.
We can make it if we try.
I'm gonna hold on, hold on with me
And don't give up on me, oh-ooh, -oohohoooh –baby,
Oh baby, Oh baby, please, don't-give-up-on-me.
Whatever you do, we gonna make it, gonna make it through.
Don't you give up on me, please, please, please.... Promise me
Don't-give-up-on-me.

Suerte y hasta pronto.

Francisco Espinosa.

lunes, 11 de mayo de 2009

TE DIRÉ MENTIRAS.

¡Saludos!

Antes que nada agradezco su necedad y sus visitas, a pesar de la escasez de textos y novedades en este blog. De verdad es importante recordar que de pronto hay quien pasea por estos lares.

Después del trámite, les tengo un anunció que hacer: he decidido unirme a las hordas de amigos que tienen más de un blog. No tienen que decirlo; si no puedo con éste ¿pa’ qué quiero otro? Pues no sé. Pero entre una cosa y otra he tomado la decisión de aventarme a ver qué pasa, corriendo el riesgo de quedar en ridículo delante de ustedes como muchas veces ya antes. Me explico:

He comentado hasta el hartazgo mi incapacidad de escribir. Entre mi itinerante falta de disciplina y ciertas condiciones que no logro comprender las letras se me agolpan y se rehusan a salir. Sin embargo… últimamente tengo ganas de reintentar. De regresar. De redescubrir. Así pues, he decidido abrir un blog exclusivo para subir cuentos cortos. Muy cortos. Ficciones diminutas, de un párrafo a una cuartilla de texto profesional, tratando de re-encontrar la forma, la voz, el oficio, los placeres que he olvidado. Y así surge TE DIRÉ MENTIRAS. El plan es subir un texto cada día, de lunes a viernes (los fines de semana no me verán ni el polvo), esperando completar para el próximo año alrededor de 250 historias que hayan logrado escapar al embotellamiento en mi cerebro. Usualmente no soy bueno para textos cortos, estando acostumbrado como estoy a expanderme cual verdolaga, pero la idea es ésa… ponerme un reto e ir, con sus complicaciones, acuciando el quehacer de escritor.

Ya está arriba el primero y, como es de esperarse por el formato, encontrarán un textito plagio/homenaje/mala-copia a Monterroso. Tocará esperar hasta cuando me dura el gusto, las ganas, la inspiración o la vida para seguir poniendo a prueba su paciencia. Les dejo la liga. Se agradecen comentarios, que inviten a sus amigos (que siempre es divertido invitar a desconocidos a ver a un hombre hacer el ridículo) y linkeadas (que serán recíprocas):

http://blackpaco-cuentitos.blogspot.com/

Suerte y hasta pronto.

Francisco Espinosa.

miércoles, 15 de abril de 2009

ESPEJITO, ESPEJITO.


Hoy al espejo le dio por contarme cuentos.

Cuentos que se parecen tanto a otros cuentos que ya había escuchado antes, pero con personajes diferentes.

Cuentos con olor a nostalgia y a esperanza. A sueños y a derrotas. A sudor y frío.

Cuentos sin moraleja, sin antagonistas, sin tres actos. Con pasión, con motivación, con ciego abandono.

Cuentos que saben a sexo húmedo, a piel sensible, a lágrimas secas.

Cuentos de superhéroes y cicatrices infantiles. De bufones y curiosidades adolescentes. De villanos y destrozos madurados.

Cuentos que se sienten en la piel como un beso profundo, como una caricia suave, como una mano pegada a otro cuerpo del que no se puede despegar.

Cuentos mutantes, cambiantes, moldeables. Épicas fársicas. Tragedias épicas. Farsas trágicas.

Cuentos con imágenes de siluetas desnudas, de ojos que brillan, de sonrisas que salvan.

Cuentos que cambian vidas, que rompen cimientos, que se vuelven, una y otra vez, escándalos.

Cuentos que escuché atento, soñando sin dormir, hasta que el silencio llegó. Y ahí, en mi reflejo, encontré la huella de tu paso por mi casa.

Gracias espejo, por tan maravilloso sueño.

Suerte y hasta pronto.

Francisco Espinosa.

jueves, 9 de abril de 2009

EL PESO DE LA LABOR INÚTIL.

Hay dos deberes, digamos, cotidianos que detesto realizar; cortarme las uñas, en particular las de los pies, y rasurarme. Sé que son tareas de higiene personal y que son importantes para el aseo y la buena apariencia… pero de verdad puedo llegar a odiar los días en que me toca hacer cualquiera de las dos.

No se confundan, en materia de limpieza disfruto las actividades usuales tanto o más que todo el mundo. Sé que el cuidado propio es una forma de consentirse y que hay quien convierte estas actividades en ejercicios sensuales y voluptuosos. Pero es que todo otro acto de higiene tiene un sentido, como yo lo veo, más profundo y con fines definidos que las dos labores que expongo, para mí, carecen. Me molesta el tiempo que les invierto y me roban por poco que sea, resiento las preparaciones para su ejecución y odio que sin importar cuanto haya pasado, el momento de volver a repetirlo aparece siempre demasiado pronto. Pero en fin; ese momento llega, se realiza y no queda más que esperar que lo que acabas de cortar vuelva a crecer para repetir, una y otra vez, hasta el delirio, la misma actividad desgastante.

Es probable que en el caso de la rasurada, mi rencor se deba a que nunca he tenido el suficiente vello facial. Rasurarme diario, como para acostumbrarme a su práctica constante, sólo me dejaría los amplios cachetes rojos y tasajeados, como ya me quedan tras rasurarme una vez a la semana (lo he intentado dos veces a la semana, y sólo logro quedar con más cortes de los usuales, por alguna razón). Y sin embargo los pelillos insistentes crecen, en lugares sí en lugares no, por mis mejillas y cuello, hasta quedar sólo como pequeñas astillas que salen de mi rostro y que lijan al tocarlas… pero nunca crecen más allá de eso. Es molesto y desagradable, casi tanto como esperar la apertura de los poros por el agua caliente, cubrir más de la mitad de mi rostro con espuma, supuestamente refrescante, y pasar la navaja una y otra vez (porque esos malditos pelillos se rehúsan a ser cortados de una sola pasada) hasta que en uno u otro lugar sale una gotilla de sangre y la piel se irrita.

Del cortar de uñas no hablaré por aquellos lectores despistados que caigan por acá y no estén acostumbrados a mis asquerosas descripciones.

Sin duda habrá alguna finalidad práctica para ambas labores, pero yo no puedo verlas, quizá por mis particulares cualidades, pero esta pelea insensata contra la naturaleza, contra el cuerpo mismo, me parece delirante. Se dice que uno de los síntomas de la locura es la repetición obsesiva de una actividad esperando un resultado distinto. ¿Y no es una locura cortar trozos de uno esperando quizá, que dejen de crecer? Como si se quisiera que el cuerpo se detuviera, dejara de desarrollarse, detuviera el tiempo y tuviéramos que olvidar la mutilación metódica y lenta a la que nos sometemos cada cuando. Y sin embargo nos dejamos llevar y marcamos el paso lento de los días seccionando incansablemente, en una labor inútil que se repite y se repite y se repite y se repite y se repite… quizá sin saber muy bien por qué.

A finales de marzo del 2006 se abrió este blog, dejando algunos escritos que algunos leyeron y quizá recuerdan, muchas canciones, algunas quejas e ideas tiradas al éter del ciberespacio en búsqueda de voces u ojos afines. Quedaron en el pasado un largo y tedioso escrito sobre lo que yo considero como el género de luchadores, sobre el fin del 2006 y mi rencor en su contra, sobre amar a Laura y después follarla perversamente, sobre sueño y dolores, sobre programas de radio y mujeres, sobre noches y escándalos, hasta que a mediados del año pasado decidí cerrarlo y borrar con ello más de dos años de una pequeña historia. Muchos de esos escritos se perdieron y otros están ocupando memoria en mi ordenador, y ahí se quedarán. Volví a abrir el blog porque… no, todavía no sé por qué.

Escribo a estas alturas por compulsión, por no olvidarme, por no renunciarme, por no morirme. Y ni siquiera escribo lo que quisiera escribir, lo que podría, lo que debería, lo que amo. Sólo escribo para ver si así desaparece este molesto chirriar de engranes oxidados dentro de mi cabeza.

Dicen, también, que el ser humano es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra, condescendientemente, como si hubiera alguna opción. ¿Se puede esperar más de un animal que dedica tiempo de su vida en mutilar partes de su cuerpo que seguirán creciendo una y otra vez hasta que muera? Quizá es que no hay opciones, quizá es que es lo único que sabemos hacer, quizá no queda otra más que pelear ciega y desquiciadamente contra la naturaleza, contra el tiempo, contra el olvido, contra el destino, contra la puta vida y esperar ganar, al menos una vez.

Después de casi un año se escribe algo en este blog, sufriéndolo, doliéndolo, odiándolo, con el peso de la labor inútil estampando cada letra en su lugar. Porque para esto tampoco encuentro ya un sentido más profundo y ni con fines definidos que pelear batallas perdidas contra el olvido de mi mismo.



DEATH CAB FOR CUTIE - EXPO '86.

Sometimes I think this cycle never ends.
We slide from top to bottom and we turn and climb again,
and it seems by the time that I have figured what it's worth
the squeaking of our skin against the steel has gotten worse.

But if I move my place in line I'll lose.
And I have waited, the anticipation's got me glued.

I am waiting for something to go wrong.
I am waiting for familiar resolve.

Sometimes it seems that I don't have the skills to recollect:
The twists and turns of plots that took us from lovers to friends.
I'm thinking I should take that volume back up off the shelf
and crack it's weary spine and read to help remind myself.

But if I move my place in line I'll lose.
And I have waited, the anticipation's got me glued.

I am waiting for something to go wrong.
I am waiting for familiar resolve.
I am waiting for another repeat,
another diet fed by crippling defeat,
and I am waiting for that sense of relief.
I am waiting for you to flee the scene,
as if you held in your hand the smoking gun
and on the floor lay the one you said you loved.

And it's strange;
they are basically the same
so I don't ask names anymore.

Sometimes I think this cycle never ends.
We slide from top to bottom and we turn and climb again,
and it seems by the time that I have figured what it's worth
the squeaking of our skin against the steel has gotten worse.

‘Ora en español, pa’ que no digan:

Algunas veces creo que este lapso nunca termina.
Nos deslizamos de la cima al fondo y regresamos y subimos otra vez,
y parece que para cuando descubrimos lo que es valioso
el rechinido de nuestra piel contra el acero está peor.

Pero si me muevo mi lugar en la fila perderé,
Y ya he esperado, la anticipación me tiene pegado.

Estoy esperando que algo vaya mal.
Estoy esperando la resolución habitual.

A veces parece que no tengo la habilidad de evocar:
Los giros y las vueltas de la trama que nos llevaron de ser amantes a amigos.
Pienso que debería volver a tomar ese volumen del librero
y crujir su gastado lomo y leer para ayudarme a recordar.

Pero si me muevo mi lugar en la fila perderé,
Y ya he esperado, la anticipación me tiene pegado.

Estoy esperando que algo vaya mal.
Estoy esperando la resolución habitual.
Estoy esperando por otra repetición,
otra dieta alimentada por mutilante derrota
y estoy esperando por esa sensación de alivio.
Estoy esperando que abandones la escena
como si tuvieras en tu mano el arma humeante
y en el piso yaciera aquel al que decías amar.

Y es extraño;
son básicamente el mismo
así que ya no pregunto nombres.

Algunas veces creo que este lapso nunca termina.
Nos deslizamos de la cima al fondo y regresamos y subimos otra vez,
y parece que para cuando descubrimos lo que es valioso
el rechinido de nuestra piel contra el acero está peor.

Suerte y hasta pronto.

Francisco Espinosa.